Cuando pensamos en una marca de repelentes e insecticidas, pensamos en una marca específica (que no vamos a nombrar). Ante un posicionamiento tan fuerte, una marca nacional como Tyson tenía un enorme reto por delante para introducirse en la cabeza del consumidor.
Tyson no podía comportarse como esa otra marca de la cual no hablamos, Tyson tenía que ser un retador. Así es como creamos una estrategia de contenidos fuera de la caja para comunicar las bondades de los productos Tyson y su excelente relación calidad / precio. Los contenidos estaban inmersos en la cultura popular y le hablaban a un público más joven, cuya mente aún no estaba tan invadida por la otra marca.